Estamos dispuestos a resolver todas tus dudas sobre los cabeceros de cama. Y lo haremos en las siguientes líneas. Encontrarás las funciones que debe de tener un cabecero y los tipos de cabeceros que puedes encontrar en el mercado. Te transportaremos a la Edad Media para explicarte qué es una cama con dosel y te enseñaremos cómo realizar tu propio cabecero, cómo restaurarlo y, por supuesto, cómo colocarlo. ¿Nos acompañas? Empezamos.
El tamaño SÍ importa. Pues sí, según el tamaño que elijas crearás una determinada sensación en tu habitación.
En líneas generales podemos decir que si quieres que la estancia se vea más grande, tu elección ha de ser un cabecero bastante más grande que la cama. Si pretendes lo contrario el cabecero no debería sobresalir ni por arriba ni por abajo ni por los laterales.
Si buscas profundidad, cabecero oscuro. Si quieres ganar algo de espacio a lo ancho, uno con rayas horizontales.
Fabricados con hierro forjado. De múltiples formas y diseños. Considerados como los más románticos. Existen algunos cabeceros de cama forjados que pueden llegar a ser auténticas obras de arte.
Depende de la madera que escojas y la forma que desees, puede ser también muy elegante. La madera desnuda siempre ofrece calidez.
Aceptan numerosos tejidos, textiles y colores y recrean multitud de ambientes. El tapizado nunca pasa de moda textil del hogar.
Material artificial que imita al cuero a un precio bastante más inferior. Tienen la gran ventaja que son lavables y por tanto puedes eliminar los ácaros. Además hoy en día existen máquinas como la Sirthink bed cleaner que te permiten limpiarlo con mucha comodidad.
Es un tapizado de estilo inglés que se caracteriza por la colocación ordenada de botones.
El tapizado de este tipo de cabeceros forma cuadrados. En muchas ocasiones se asemeja al capitoné.
Son muy simpáticos. Fotos personalizadas de lo que tú quieras. A tu gusto. En el siguiente enlace puedes ver nuestros cabeceros personalizados:
8. Tela
Cualquier tipo de tela puede recubrir el cabecero.
Muy similar a los tapizados.
Normalmente son de madera aunque admiten otros materiales. La rejilla puede estar formada por pequeños cuadrados o por líneas horizontales o verticales.
Incorporan luces en su estructura como su nombre indica. Hay infinidad de variaciones. Decoran e iluminan la habitación.
Como los cabeceros de forja admite numerosas formas. Habitualmente hechos a medida.
Normalmente realizados con cristal denominado vinílico. Como podrás suponer tiene dos grandes desventajas: se puede romper y se ensucia muy fácilmente.
Se puede crear una estructura recubierta de cerámica apoyada en la pared o incrustar piezas de cerámica directamente en la pared.
Es una solución bastante moderna. Admite numerosas combinaciones. Se pueden formar con lejas para dejar objetos personales o huecos a modo de cajones.
El cabecero es un elemento que le da mucha prestancia a cualquier habitación. Ya te hemos comentado que también tiene la misión de proteger la pared y la ropa de cama.
Para elegir tu cabecero tienes que tener en cuenta el resto de muebles que componen la habitación.
Por supuesto has de fijarte en la mesilla de noche. Eso lo primero y que tu cabecero esté en consonancia con su estilo.
También has podido deducir que si elijes por ejemplo un cabecero de pladur o retroiluminado puedes prescindir de la mesilla de noche.
Has de pensar también si te viene bien poner un elemento de decoración a los pies de la cama. Los baúles son una muy buena solución porque además de cumplir con esa función decorativa te pueden servir para guardar objetos del hogar.
Con un cabecero de forja con un mueble de dormitorio con madera antigua puede ser una combinación muy bonita, ¿no crees?
Las cortinas, los armarios, las lámparas deben guardar también la misma concordancia para que te sientas a gusto en la habitación.