Hamacas de playa y sillas camping

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En los campings hay un montón de actividad. Tanto si estás en un camping de montaña o de playa ni tú ni los tuyos vais a parar ni un momento. Te vas a levantar bien temprano porque seguro que estás en una tienda de campaña en donde no tendrás cortinas para evitar la entrada de la luz del sol. Y amanece bien temprano, ¿verdad?

Así que, ya que estamos despiertos, vamos a aprovechar, ¿no? Lo mejor es iniciar el día con una sesión de footing de una hora o algo más o un buen paseo en bici. Tanto si optas por las zapatillas o por el manillar, ¡qué rico un buen baño en la playa para quitarse el sudor! Si estás en la montaña y tienes un río cerca, ¡pues también! Aunque aquí es más que posible que el agua está algo más fría que en el mar ¡pero el mundo es de los valientes!

Continuaremos el día con un buen desayuno. ¡Claro que sí! El desayuno es la comida más importante del día y hay que hacerla con calma. Aquí sí que te van a venir bien los muebles de camping que te has llevado, entre ellos sillas y sillones. Un desayuno bien fuerte y bien relajado.

¿Qué hacemos luego? Pues habrá que coger las mismas sillas y los mismos sillones y dirigirnos a la playa, ¿no? No hay que olvidar la sombrilla para evitar los rayos solares. Leer el periódico, una buena revista o un buen libro siempre es un gran placer antes de tomarse el segundo baño del día en el mar.

Eso para los “turistas costeros”. Los amantes de la montaña lo más probable es que después del desayuno se hayan preparado las mochilas, hayan pergeñado una ruta y se hayan adentrado en ella. Caminar por la montaña y adentrarse en paisajes maravillosos. Para estos, lo de sentarse en sillas y sillones es algo más complicado. Pero todo llegará.

Y el día va transcurriendo entre baños de mar o largos paseos. Algún que otro descanso en la montaña y la siesta para los de la playa. Ya tocará el momento de volver al camping, el momento de prepararse una buena cena, comentar todo lo que ha ocurrido durante el día y planificar el siguiente. Y después de la cena, y de uno de estos días en lo que no has parado, ¡qué bueno tener sillas y sillones la mar de cómodos para relajarse mientras observas un cielo oscuro pero estrellado!